Primer premio del Segundo Concurso Literario
Fernando Aguilar





Ilustración: Oscar Genco
Ilustración: Oscar Genco
«En la partida de cada uno de ellos, mi pueblo fue perdiendo en mi interior un poquito de encanto. Vinieron otros, como sus hijos, que le han dado emociones nuevas, pero que no reparan ese cristal resquebrajado de la primera foto, del tiempo en que uno sueña con una vida interminable y feliz.»
Compartimos con Ustedes el relato que obtuvo el TERCER puesto en el III Concurso Internacional de Relatos de Campo y…
«El “Veterinario†Haroldo Mateljan cumplÃa sus funciones normalmente. El “Vasquito†Héctor Larrañaga inseminaba. Los hermanos “Cacique†y “Carlitos†Guidobono, junto a “Gorra de lana†Bernardo Silvano, formaban el resto del equipo general para llevar adelante dicho emprendimiento.»
«Un partido, luego la revancha y después “el buenoâ€. La noche se alargaba y en algunos se notaba “un ligero descontrol internoâ€. Si no habÃa más plata, se cargaba en cuenta, sin riesgo, porque ese crédito era sagrado.»
-EDICIÓN 2020/21- Museo Iriarte Pola y Ramón Marzol y Editorial Krivodol Press Comunican: Desde el Museo Iriarte tenemos el agrado…
«Las relaciones entre vecinos de toda la vida siempre fueron cordiales, respetuosas, solidarias y demás calificaciones positivas que de ninguna manera podÃan esbozar la posibilidad de conflicto alguno.
Eso sÃ, ambos jefes de grupo, tenÃan su “personalidad†y “ancestralidad italianaâ€â€¦»
«HabÃan arribado al pueblo dos nuevos policÃas, Asunción y Nicolai. A poco de estar allÃ, la escasa densidad poblacional permitÃa establecer vÃnculos amistosos entre controlantes y controlados.»
Compartimos con Ustedes el relato que obtuvo el SEGUNDO puesto en el III Concurso Internacional de Relatos de Campo y…
«(…)El estado de los allà presentes en esa noche era calamitoso pero la decisión no se hizo esperar. Con el gringo Belladelli a la cabeza, César Nicolás, Fabián “el ruso†Primo, “mosquito†Ricardo Marzol, Sergio RamÃrez, el “vasquito†Amestoy, Gabriel Garnica y algunos más salieron en busca de una cama donde reposar, al menos, tres horitas.»
«HacÃa escasos quince minutos que se habÃa retirado del boliche, totalmente mamado. Caras de preocupación, incertidumbre y la designación apresurada de un grupo de rescate hacia la casa del gordo que, sentado con un pucho apurado como medicina y un vaso de agua fresca, contaba la pelea que terminó en puñalada.»
«Se tomaron el tren en Retiro y llegaron donde el destino los habÃa citado: el tambo manual del Vasco rico de la zona rural de Iriarte, don AgustÃn Goyenechea Irasusta. TenÃa unas doscientas vacas en ordeñe, que vivÃan a la intemperie y …como pocas veces en el transcurso de sus vidas ellos habrÃan coincidido en algo : “Ese vasco estaba rematadamente locoâ€.»
«Cuando hablaba con sus amigos de confianza solÃa decirles que si alguien le gustaba, él no tenÃa lÃmites. Estaba dispuesto a todo porque su lema era “solo el que ama, comprendeâ€. No le temÃa a nadie y lucharÃa por su presa hasta las últimas consecuencias.»
«Con Cirilo fuimos amigos y cómplices en las mañanas luminosas del verano. Él era de naturaleza salvaje y los dos compartÃamos una sola niñez nutrida de asombros y de juegos inocentes (…)»
por Carmen Verlichak Entrevista, Diario del Viajero (21/10/2020)