El 3 de junio de 2019 el amigo Pedro Cocco, de la localidad de San Gregorio (Santa Fe) me envÃa un correo diciendo que la ClÃnica del Doctor Baleirón serÃa desmontada para su reutilización edilicia en un hotel y por lo tanto, la familia liquidarÃa los bienes. Según Pedro, la clÃnica fue originalmente – año 1948 – propiedad del Doctor Valero.
Atento a ello Javier Marzol se pone en contacto con Juan Manuel (hijo) e inicia las primeras conversaciones. Fuimos a visitarlo, lo invitamos al Museo, luego vinieron su madre y hermana y finalmente llegamos al acuerdo de trasladarla “completa†al Museo.
A poco de andar nos trajimos todo, excepto la máquina de rayos dado que lleva un tratamiento especial. Para ello trajimos unos técnicos de Rosario quienes la desconectaron y ahora esperan para su montaje definitivo la construcción de la sala que la alojará. Ya, a octubre de 2021 está prácticamente montada, habiendo traÃdo desde Buenos Aires, todas las aberturas.
Sala de RAYOS X
Obstetricia
Atención primaria
Consultorio
Recepción
Placa conmemorativa redactada por Marcela, mamá de Juan Manuel :
«Este edificio recrea espacios institucionales de la histórica ClÃnica San Gregorio, en la vecina localidad de San Gregorio, Santa Fe, en donde el recordado Dr. Carlos Francisco Baleirón, «el correntino viejo», a inicio de los años ‘50, diera continuidad durante casi cuatro décadas a la labor médica ejercida por su predecesor, el Dr. Modesto Valero, para heredarla luego, a su muerte, a su único hijo y médico, el Dr. Eduardo Francisco Baleirón.
Movidos por una profunda vocación que signara sus misiones de vida, padre e hijo ejercieron la medicina rural a conciencia y en completa entrega, más allá de horarios y conveniencias personales, no sólo trayendo salud al cuerpo, sino también llegando, con la valiosa palabra siempre oportuna, al alma de cada paciente.
Retomando la excelencia clÃnica legada por su padre, Eduardito, como el pueblo cariñosamente lo llamaba, imprimió a su trayectoria, hasta el último minuto, no sólo responsable idoneidad profesional, sino también una destacable calidad y calidez humana en el trato a sus pacientes.
Vaya este merecido reconocimiento de su familia como sentido homenaje a ambos y a la huella profunda e indeleble que, como una impronta, quedó grabada en esa comunidad, asà como nuestra mayor gratitud a los dueños del Museo Iriarte, por llevar a cabo la construcción de esta magnÃfica obra para sostener en la memoria colectiva esta página de la historia de la medicina rural.«
Dr. Carlos Francisco Baleirón (07/04/1925- 17/09/1992)
Dr. Eduardo Francisco Baleirón (19/11/1956- 16/03/2018)
Mi mamá se jubiló en la clÃnica, en la década del 60 comenzó a trabajar como única enfermera de Dr. Carlos F. Baleirón. NacÃ, crecà en ese lugar… Cada espacio son recuerdos de mi vida junto a mi madre, ayudando, colaborando con actividades de acuerdo a mi edad… Lo que más me gustaba era la Sala de CirugÃa… Gracias por darle todo el valor que tiene cada espacio porque está relacionado con La Vida de cada familia de la zona. Un abrazo.
Mi madre: MarÃa Teresa Payero de Navarro
Laura Navarro
Como siempre incorporando, en el museo aquellas cosas que fueron el pasado, pero que si no hubiese existido hoy no tendrÃamos este futuro, muchas gracias por sumar una muestra más!!!
Que bueno. La compra hecha por el museo. Sigue sumando historia al lugar. Felicitaciones!!!
Gracias Oscar Marzol, por recrear la historia de esta manera
Felicito a Manu y su familia por esta maravillosa decisión de conservar como reliquias los instrumentos que atravesaron la vida de un pueblo que amo y sigue amando al apellido Baleiron. Vaya mi recuerdo a mi querido médico personal de la niñez e inseparable amigo de mi tÃo, tan inseparable que al partir el dr. Carlos se llevó con él su alegrÃa. TÃo Baldemar nunca más fue el mismo. Eso solo lo puede lograr un hombre que da la vida por su gente.