Museo

El jurado de la III edición del Concurso Literario Campo y Pueblo seleccionó 40 trabajos entre los que saldrán los…

«Hoy te saludo con una oración, un abrazo final y un hasta siempre, amigo Carlos.»

«No dudó un instante en responderse que aquella sería una operación casi de rutina y que en poco tiempo su vida se normalizaría. Sin embargo, se sintió tremendamente sola…»

«Se tomaron el tren en Retiro y llegaron donde el destino los había citado: el tambo manual del Vasco rico de la zona rural de Iriarte, don Agustín Goyenechea Irasusta. Tenía unas doscientas vacas en ordeñe, que vivían a la intemperie y …como pocas veces en el transcurso de sus vidas ellos habrían coincidido en algo : “Ese vasco estaba rematadamente loco”.»

«Comenzó, como jugando, a complicarle el camino a las hormigas en un intento inconciente de saber cuál sería su reacción ante un acontecimiento imprevisible. De pronto lo asimiló con su vida, con sus propios tropiezos, con su volver a empezar y volver a caer y detuvo su mano.»

«La noche de invierno del 17 de julio de 1962 presagiaba una velada boxística de primer nivel en el Club San Martín de Iriarte. Pelea pactada a diez rounds entre el crédito local Miguel “Cirujano” Bontempo y el campeón provincial Avelino “Rompehuesos” Sagardía. Arbitro del combate… ¡quién otro que no fuera el Cacho Arriola!»

«Logró despertar la envidia de los invitados varones con su habilidad para los pollos a la parrilla rociados sólo con limón y la aprobación de las mujeres por su capacidad histriónica, que despertaba curiosidad y alegría. Innumerables “aplausos para el asador”, que él respondía con un simple gesto como no dándole importancia ( pero que en el fondo, disfrutaba)»

«Llegó el sábado 26 de mayo del 70. Frío, con una persistente y fina llovizna de otoño. En la fonda de la cancha de paleta de don Pedro Aramburu se habían congregado los peones de estancia y los trabajadores changarines del pueblo.»

En los veranos de 1959, 1960 y 1961, en esta casona estudié “inglés” con la recordada profesora “chiquita Tuero”. También nos hemos bañado en el tanque del molino.

«Todos estaban excesivamente alegres. El notó que sólo Julián, el menor del grupo, se miraba para adentro. Comprendió que en algo se parecían y por eso prefirió no preguntarle nada.»

«Fueron duelos de ingenio: él amagaba con irse, haciendo ruido como si se retirara de la habitación y ellos caían en la trampa ligando lo que viniera con chancleta o cinturón. Pero aún así, muchísimas veces se escaparon.»

Arturo Frondizi nació el 28 de octubre de 1908, en Paso de los Libres, Provincia de Corrientes, Argentina. Fue el…